VISITA A LA ZARAGOZANA

Hace unos días disfrutamos de la visita a la fábrica de La Zaragozana,una de las dos únicas cerveceras independientes que quedan en España, en la que se produce la famosa cerveza Ambar. La visita dura unas dos horas y en ella se visita la fábrica, situada en la Calle Ramón Berenguer IV de Zaragoza, que es Patrimonio Industrial de Aragón y que se encontraba fuera de la ciudad originalmente.Centrándonos en la visita, la realizamos con una chica del Departamento de Marketing muy amable y empezó con el reparto de batas en la sala de degustación ,lo que generó las primeras bromas y risas. Allí mismo estuvo hablando sobre la historia de la fábrica y el modo de fabricación de la cerveza y nos dieron las primeras explicaciones acerca de su invención por los sumerios como sopa alimenticia hasta su evolución en bebida en tiempos modernos, introducida en España por Carlos I en el S.XVI.
Posteriormente fuimos pasando a distintas dependencias de la fábrica como la Maltería, la sala de Cocidas y la Sala de Fermentación.

En la Maltería pudimos admirar máquinas de 1920 de la casa Teisset-Rosse-Blault, que con sus correajes de cuero siguen en funcionamiento hoy día y aprendimos como se transforma la cebada en malta.
En la Sala de Cocidas, que por su decoración parece un balneario de principios del siglo XX, probamos las maltas que se utilizan para algunas variedades de cerveza y el lúpulo que se empezó a emplear en la edad media como conservante por la monja Ildegarda. Todo ello rodeados de las calderas de cobre que estuvieron en funcionamiento hasta 1989 y los filtros de marcos que limpiaban de impurezas el mosto.
La Sala de Fermentación es la única que queda en España con tinas en abierto. Dependiendo de la cerveza, pasan entre 45 y 60 días fermentando hasta que se pueden envasar. La que vimos nosotros era Caesar Augusta.Una cosa que aprendimos en la visita es que la cerveza también se pasteuriza.
Tras terminar la visita a la fábrica propiamente dicha, fuimos a visitar el Museo de la Cerveza. Se encuentra situado en la parte superior de una gran nave (la antigua embotelladora) y en él se pueden ver, entre otras muchas cosas, maquinarias antiguas, los diplomas conseguidos por La Zaragozana, la historia de la fábrica en imágenes, las campañas publicitarias que se han realizado, cubas y toneles antiguos.... todo ello con sus correspondientes explicaciones.
Leerlo todo podría llevar más de una hora, pero en media hora más o menos se puede ver lo más interesante por encima.
Para finalizar la visita, volvimos a la sala de degustación donde nos ofrecieron probar la cerveza que prefiriéramos junto con un rico picoteo.